Familiares de un comerciante raptado hace un mes en la localidad Villa Trina, en Moca, pidieron hoy al presidente Danilo Medina que por favor ordene al procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito a designar al procurador adjunto Francisco Polanco y a una autoridad de la fiscalía local para que agilicen las investigaciones conjuntamente con el magistrado Fernando Martínez.
Durante una rueda de prensa que encabezaron los nueves hijos de Ramón Antonio Sánchez Grullón (Moncho), otros familiares y allegados frente al Palacio de Justicia de Moca, también pidieron que las indagaciones en torno al caso se realicen de manera abierta, “sin ataduras y sin distinción de personas civiles o no”.
“Esperamos honorable presidente de la República que comprenda la situación que estamos atravesando y a la mayor brevedad posible acoja nuestro pedimento”, dice un documento que leyó Rosa Sánchez Fernández a nombre de los familiares del comerciante raptado.
Asimismo, en el comunicado expresa que se dirigen a toda la población en general que pueda brindar alguna información verídica y que conlleve al paradero de su padre y ofrecen una recompensa que será entregada de manera confidencial y que pueden llamar al número telefónico 849-861-6866.
De su lado, el abogado Víctor Sánchez Fernández, otro de sus hijos, dijo en la rueda de prensa que el primero que se sometió a un proceso de investigación fue él a fin de que se esclarezca la desaparición de su padre.
Indicó que como tiene muchos años ejerciendo el derecho, investigaron a ver si el rapto de su progenitor tenía que ver con uno de los casos que ha llevado, pero que los resultados dieron negativo, por lo dicen no saber las razones por las que se produjo el hecho.
Mientras el procurador fiscal de Espaillat, José Anibal Carela dijo que un promedio de 40 a mas personas, incluyendo familiares del empresario, agentes policiales y otros particulares han sido interrogados.
En lo que concierne a los policías que se encontraban de servicio la noche que ocurrió el rapto, el representante del Ministerio Público comunicó que han sido sometidos a intensos interrogatorios.
Cuando al fiscal se le preguntó cómo pudo haber ocurrido un hecho de esa naturaleza frente a un cuartel de la Policía, respondió: “Esa es la pregunta que todos nos hacemos”.
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